No podemos aportar datos fiables sobre la superestructura de la tumba, debido al soterramiento de la entrada de la tumba. Aun así, la fachada de la tumba próxima TT129 debía de llegar hasta la puerta del posible pilono de la tumba de Pathenfy. Probablemente, la misma fachada fue ampliada durante la construcción de la tumba TT129 en dirección sur desde la entrada. Otras probabilidades argumentadas por Schenkel, a pesar de ser menos factibles, son que la entrada fuera un atrio con techo de bóveda. Pasando la entrada nos encontramos con un espacio constituido por una sala hipóstila dividida en tres espacios por dos hileras de tres pilares cuadrados. La cobertura de este espacio, que debía de actuar como sala de culto, estaba construida con un techo plano. Mientras que la nave central se terminó del todo, la nave norte no está acabada, puesto que sólo presenta el pilar del extremo este y el espacio queda insinuado, quizás por la proximidad a la tumba TT129. La nave lateral sur presenta los tres pilares, y la superficie sur está desbastada, y presenta en el extremo sudeste una apertura que conduce a la tumba TT269. Sólo la superficie de los pilares se acabó de pulir, mientras que el resto ofrece un aspecto inacabado. A través de una puerta situada en el extremo sur del muro oeste, se accede a unos espacios añadidos que conducirán hasta el lugar de la sepultura. Una primera sala rectangular, en dirección este-oeste, acaba en una rampa y, mediante un pasaje, acaba en la cámara más occidental. En el pavimento de esta sala, situada por encima de la rampa, se practicó un pozo funerario. Al final del pozo hay dos bifurcaciones para dos cámaras, en direcciones este y oeste, en una se debía de alojar el sarcófago de Pathenfy. La tumba sufrió remodelaciones posteriores y, por lo tanto, es difícil aseverar si todas las salas pertenecen a la fase de construcción de la tumba en época saíta. |