Está rodeada de tres tumbas (dos al norte y una al sur) que Lepsius consideró de la dinastía XXVI pero estudios recientes confirman que las del norte (BN1 y BN2), una de las cuales pertenece a Paikheritaisu, son de la dinastía XXX, y la del sur no se conoce la datación. Al fondo del pozo sur, a 6 m de profundidad, está la galería de Padineit, visir de la dinastía XXX durante el reinado de Nectanebo I.
La tumba de Bakenrenef en Saqqara tiene similitudes con los palacios funerarios del Assassif. Para poner un ejemplo, las dimensiones totales de la estructura (44 m de longitud y 16 m de anchura) son casi las mismas que las de la tumba de Basa en Tebas Oeste. La estructura funeraria de Saqqara tiene, además, la misma orientación que las tebanas (este-oeste) con un pilono de entrada al este.
La tumba de Bakenrenef se divide en superestructura, conservada en parte, y compleja subestructura a la cual se accede mediante seis pozos.
La superestructura de la tumba no está excavada en la roca, y consta de un pilono de adobe en la entrada, que reemplazó durante la dinastía XXX al pilono existente originariamente. El hecho de que la carretera pase justo por delante el pilono dificulta la observación de los vestigios que restan del pilono original. Tras la puerta se accede en un patio abierto casi cuadrado (A), con una longitud de 9,70 m y una anchura de 9,20 m. En el centro hay un estanque de 1,30 m de longitud por 0,52 m de anchura y una profundidad de medio metro, la función del cual es desconocida, pero tiene paralelismo con algunas tumbas de la zona de Assassif.
A continuación nos adentramos en la parte excavada en la roca y encontramos una antecámara de planta rectangular (B) de 4,80 m de largo, 6,20 m de ancho y 2,60 m de altura, modificada con el añadido de una pared al este, y otra al noroeste. Las paredes de la sala estaban cubiertas de cal sin inscripciones y el techo plano decorado con estrellas amarillas sobre fondo azul con una inscripción central a modo de cenefa con dos cartuchos de Psamético I. En la estancia se encontraron dos pozos llenos de arena.
Entre la antecámara y la sala de pilares posterior hay un pasillo con una falsa puerta en la parte norte del muro oeste y dos pequeñas habitaciones encaladas sobre muros de adobe.
El pasillo nos conduce hasta la sala de pilares (C) con 11,65 m de longitud por 7,65 m de anchura, dividida en tres naves por dos hileras de tres pilares de sección cuadrada. La nave central es más larga que la sala, con 14,70 m de longitud, y se adentra en una pequeña habitación. Al oeste de los muros norte y sur hay unas aperturas que habían sido cerradas por una puerta de madera, dado que se han encontrado restos sobre el pavimento. Las aperturas conducen a dos capillas (H, I), una al norte y otra al sur, cada una con un pozo (2 y 3) en el pavimento que en épocas posteriores fueron utilizados como lugar de entierro. El pozo 2, situado en la cámara del sur, con una profundidad de 16 m, desemboca en dos habitaciones pequeñas con aperturas en las paredes este y oeste. El pozo 3 tiene una profundidad de 12,75 m y se abre a dos habitaciones sin inscripciones, pero con dos nichos cuadrados en los muros norte, sur y oeste. Los nichos, situados a cada lado de la puerta, contenían con toda probabilidad una estatua. Las paredes, columnas y nichos están inscritos con los textos del Libro del Muertos y Textos de las Pirámides. Pero la decoración de nichos y puertas, a excepción de la cornisa, no se encuentra in situ, sino que forma parte de colección de diferentes museos. El techo de esta sala era de bóveda, construido con piedra calcárea, y se encuentra casi destruido; estaba recubierta de mortero pintado y presentaba bajorrelieves con la figura del difunto Bakenrenef, representado doce veces ante las diosas del día y de la noche. Esta referencia la conocemos gracias a la descripción de Lepsius. Al sudeste hay un pozo (6), que parece ser más antiguo que la construcción de Bakenrenef y no está excavado.
Los extremos norte y sur de la sala de pilares se abren a una curiosa construcción que forma un deambulatorio o galería cuadrada que daba la vuelta a los aposentos centrales: la habitación transversal y la capilla de la estatua.
A la habitación transversal (D) se accede mediante una puerta al oeste de la sala de pilares. Es una habitación rectangular con unas dimensiones de 2,60 m de longitud y 6,70 m de anchura, orientada norte-sur con el pozo funerario principal (1) de la tumba en la mitad sur de la sala. Dispone de dos nichos a la pared oeste, uno a cada lado de la puerta, y un nicho a la pared norte y en la pared sur decorados con golas. La bóveda de piedra calcárea de la sala está rebajada con 2,63 m de luz y una flecha de 0,83 m. Al techo se le dio una capa de mortero pintado con estrellas rodeado por una línea de jeroglíficos con el nombre y títulos de Bakenrenef. Las paredes y los nichos están decorados con textos del Libro del Muertos y Textos de las Pirámides; al lado este hay una lista de ofrendas.
La habitación más occidental es la cámara rectangular que contiene la estatua (E). En la pared oeste hay una falsa puerta con una piedra donde debía de estar la estatua. Las paredes de la habitación están decoradas con textos del Libro del Muertos, y el techo está cubierto de mortero con una decoración de diez buitres en un cielo estrellado. De aquí salen dos habitaciones cuadradas laterales (F y G) destruidas en la actualidad. Los techos de las habitaciones estaban cubiertos con bóvedas decoradas de piedra caliza de una longitud de 1,65 m y 15 cm de flecha, que representan un cielo con estrellas e inscripciones.
En la subestructura se encontraron ocho pozos, de los cuales sólo hay uno que sea del periodo saita, cuatro de ellos están por excavar y no es probable que sean de la dinastía XXVI. El pozo funerario principal, de 15 m de profundidad, desciende desde la habitación transversal. Se abre al norte hacia una antecámara cuadrada por la que se accede a la cámara funeraria por su muro oeste. Las paredes estaban recubiertas de mortero sin inscripciones. La pared oeste presenta una oquedad a 80 cm sobre el suelo donde se guardaba la tapa del sarcófago hasta su colocación. El sarcófago se encuentra actualmente en el Museo de Florencia. Según las características estilísticas es un sarcófago de época saita y en el interior hay un sarcófago de madera de sicomoro cortado en un solo bloque, con pilastra dorsal donde hay un texto en tres columnas.