LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN EGIPTO

TUMBA Nº 13 de OXIRRINCO

La cámara mayor, situada al sur, tenía planta rectangular con 2,88 m. de longitud y 1,68 m. de anchura. Estaba construida con sillares de piedra caliza muy escuadrados y casi de la misma medida. En los lados largos de la cámara (este-oeste), había dos nichos vacíos, donde se depositaban los vasos canopos. El aposento estaba cubierto con una bóveda de cañón y contendría un sarcófago antropomorfo anepigráfico de piedra dura que representa a una dama. La talla escultórica de la pieza es de muy buena factura, con las características estilísticas propias de este momento artístico. Se observa que los rasgos de la cara se suavizan, mostrando una boca grande con labios delgados y perfilados, ojos más estrechos, nariz delgada y fina, y orejas muy grandes. Todos estos rasgos comportan una idealización del rostro, que tiene el rasgo más característico en la sonrisa ligera, precursora de la sonrisa griega arcaica. El modelado del rostro es muy hermoso, y sólo la nariz ha quedado malograda. Desgraciadamente, el interior había sido violado en un momento imposible de precisar. Los saqueadores habían entrado desmontando los sillares de la bóveda, y la tapa desplazada del sarcófago y la parte inferior de este vacía, muestran que la tumba había sido violada.
Desde el vestíbulo, al oeste, se construyó una cámara con 2,65 m. de largo, 0,78 m. de ancho y una altura de 1,50 m. En el interior se localizó un cuerpo sin momificar y, desplazadas en un rincón, los restos de un cuerpo momificado. Probablemente estas cámaras pertenecían al propietario principal de la tumba, y demuestran el reaprovechamiento cristiano del conjunto.
La cámara aneja situada en el este, tiene unas dimensiones de 0,97 m. de anchura máxima, 2,25 m. de longitud y 0,74 m de altura. En el interior se inhumó el esqueleto de un individuo que ocupó la cámara en época bizantina, dado que se localizó una moneda que nos sitúa entre los siglos VI y VII dC.