Hut-nesut (El establecimiento del rey) es el nombre con el que los antiguos egipcios conocían el área arqueológica de la actual Kom el-Ahmar Sharuna. Fue una localidad del Egipto Medio que ejerció el papel de capital de los nomos XVIII (en las épocas más antiguas) y XIX (durante el Período Ptolemaico). Entre sus apariciones más destacadas en las fuentes escritas destaca por su mención como lugar de origen del faraón Horemheb; figura asimismo como una de las ciudades que "abrieron sus puertas" al rey nubio Pianji durante su triunfal conquista de Egipto y, por último, es tratada con especial deferencia en la exhaustiva topografía religiosa de esta zona de Egipto que ofrece el papiro Jumilhac.

En el elenco de divinidades asociadas a Hut-nesut se encuentran los dioses Nemty, Dunanuy, Anubis o Igay, en los momentos más antiguos y, en las fases más recientes, Isis, Osiris y, sobre todo, Horus, el dios que más frecuentemente asume el título de “Señor de Hut-nesut”.

Desde el punto de vista arqueológico los restos más importantes corresponden a la denominada necrópolis principal situada en un promontorio rocoso en contacto con el límite de la zona de cultivo. Presenta dos fases de ocupación intensiva: Reino Antiguo, con tumbas decoradas pertenecientes a personajes importantes que ostentaron títulos como el de heqa-hut (jefe del establecimiento) y época ptolemaica, con tumbas de pozo con una o varias cámaras con numerosos sarcófagos antropoides de piedra, como elemento más singular; en menor proporción se han documentado estructuras funerarias del Primer Período Intermedio y del Reino Medio (reutilizando tumbas del Reino Antiguo), una impresionante tumba de pozo saita, tumbas de época romana y sencillas fosas con enterramientos cristianos. En varios sectores de la necrópolis se han hallado restos dispersos y depósitos multitudinarios de momias animales (halcones, ibis, perros y bóvidos, entre otros). Por último, una gran parte de las tumbas faraónicas fueron reutilizadas como hábitat en época tardorromana y bizantina.

Además de la necrópolis, en la zona de cultivo se ha localizado y excavado un sector utilizado como zona de hábitat durante el Reino Antiguo y varios yacimientos tardorromanos-bizantinos: una iglesia asociada a un extenso cementerio, el monasterio de Deir el-Qarabin y el asentamiento de al-Ghelida.