El-Hayz es una región escasamente poblada, que se compone de varias pequeñas aldeas a unos 40 kilómetros al suroeste de Bawiti en el Oasis de Bahariya. Tal vez el "Cuarto Oasis" de los siete mencionados en el Templo de Edfu que se encuentran en la antigua ruta caravanera entre Farafra y Bahariya y, a juzgar por las ruinas, ha sido una comunidad agrícola y comercial importante y próspera durante la época romana.
La región de el-Hayz contiene al menos cuatro importantes manantiales, Ain el-Izzah, Ain el-Sheikh, Tabla-món y Ain el-Ris, cerca de donde se encuentran la mayoría de los lugares históricos. El arqueólogo egipcio Ahmed Fakhry llevó a cabo las investigaciones científicas de la zona por primera vez durante los años 1930 y 1940, excavó varios sitios alrededor de Ain el-Ris. Se han encontrado numerosos objetos, principalmente fragmentos de sílex y láminas del Neolítico y de los Períodos Líticos y se ha identificado los lugares donde pueden haber estado los asentamientos prehistóricos y los talleres de sílex, pero se ha encontrado muy poca evidencia de actividad en el Período faraónico.
En el oeste de la región de el-Hayz, hacia el Gebel, está la pequeña aldea de Ain el-Izzah. Unos 2 km al noreste del manantial hay un antiguo asentamiento, mal conservado pero con muchos restos de cerámica que cubren el suelo. Hacia el noroeste de la aldea se encuentran las tumbas excavadas en la roca de una loma, donde se encuentran esparcidos fragmentos de momias y de ataúdes de cerámica. Los restos más interesantes son los pozos de los acueductos romanos, similares a los encontrados en otras partes del desierto occidental.
Ain el-Ris, donde están las ruinas más interesantes de el-Hayz, se encuentra a unos 2 km al sureste de la carretera principal. Este es el asentamiento más grande del oasis de El-Hayz y estaba dominado en tiempos de los romanos por una gran fortaleza de adobe. El sitio ha sido parcialmente excavado en los últimos años por un equipo de la Inspección de Antigüedades de Bawiti que encontró restos de un palacio, posiblemente perteneciente al comandante de la fortaleza, y una bodega de vino, así como huertos. También se encontraron grandes cementerios alrededor de la zona.
En el extremo norte de Ain el-Ris está la única iglesia paleocristiana conservada en el desierto occidental. A pesar de que sus pinturas están muy deterioradas, fueron descritas por Belzoni y Cailliaud en el siglo XIX e incluso Fakhry escribió sobre ella en la década de 1930. La iglesia es de tipo basílica, construida con dos pisos de adobe y dedicada probablemente a San Jorge, sugerido por la descripción de las pinturas de un hombre montado a caballo, un santo popular del oasis. El techo y las pinturas al fresco han desaparecido al igual que el piso superior, pero su planta es fácil de seguir y todavía quedan algunos restos de decoraciones incisas entre el enlucido que queda en las paredes. Fakhry sugirió que la iglesia se puede datar no más tarde que en el siglo V ó VI d.C.
No muy lejos de la Iglesia de San Jorge, Fakhry excavó varios pequeños montículos en los que descubrió en 1938 restos de una gran mansión o palacio. Las paredes aún estaban cubiertas con yeso blanco y decoradas con diseños geométricos. Otras excavaciones, entre 1939 y 1945, pusieron de manifiesto varias estructuras más, lo que sugiere que el-Hayz estuvo poblado por una rica comunidad.
A medio kilómetro al sur de la iglesia se conservan los restos de paredes de un campamento romano de forma irregular, que probablemente fue un puesto avanzado de la estructura militar en Qasr Masuda, 2 km más al sur. Qasr Masuda es una imponente fortaleza de varios pisos de casi 18 metros cuadrados, que contiene trece habitaciones con un pozo en el patio, construida sobre un montículo rocoso.
El Instituto Checo de Egiptología en la Universidad Carolina de Praga, dirigido por el Dr. Miroslav Barta, está llevando a cabo un estudio e investigación de la zona de el-Hayz. Su primera temporada (2002-3) se concentró en un control exhaustivo de la zona y fue muy productiva en la localización de muchos restos Prehistóricos y Romanos dispersos por los siete asentamiento principales bajo investigación. En posteriores temporadas el equipo ha identificado haciendas de la época romana, así como varios sistemas subterráneos de riego conocidos como manawirs. |