LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN EGIPTO

TUMBA de AMENENHAT II en BENI-HASSAN

La tumba de Amenemhat data de la Dinastía XII. Fue el último poseedor del título hereditario de "Gran Señor de la Provincia de Oryx" en un momento en que el gobierno de Egipto estaba centralizado. El texto biográfico del propietario de la tumba está fechado en el año 43, 2° mes de la temporada de inundación, el día 15 del reinado de Sesostris I.

La tumba tiene un patio y un pórtico con dos columnas delante de la entrada. La capilla es grande y rectangular, y contiene cuatro columnas poligonales, de dieciséis aristas cada una, y dos pozos funerarios. Un techo decorado está dividido en tres naves, cada una abovedada, la bóveda central está decorada con dibujos pintados de los llamados de estera. Las pinturas murales tienen temas similares a las tumbas cercanas, con motivos de agricultura y de industrias, caza en el desierto, actividades militares y ritos funerarios con portadores de ofrendas. En la parte superior de la pared sur se muestra una amplia lista de ofrendas. Una mesa, delante de Amenemhat que está sentado con su esposa, contiene productos de sus tierras. Esta tumba tardía también tiene una pequeña cámara de la estatua, al este, más allá de la capilla, con la estatua del difunto junto a su madre y su esposa. En la tumba de Amenemhat se encuentran los restos de un grupo de estatua que representan probablemente al propietario con su esposa y su madre, con una mesa de ofrendas al frente.

La decoración de la tumba es muy parecida al resto de tumbas de la necrópolis: escenas de caza en el desierto, actividades militares, trabajos artesanales, porteadores de ofrendas, ritos funerarios y escenas de luchadores. Entre estas últimas destacan cincuenta y nueve parejas de los mismos, que muestran los más diversos movimientos, con saltos y caídas espectaculares, llaves y lanzamientos. Los adversarios se representan en dos tonos marrones diferentes, con el fin de poderlos distinguir mejor. En esta escena se representa el asalto a una fortaleza. Los soldados atacantes van armados con lanzas, hachas de guerra, mazas y arcos con flechas. Entre los soldados cabe distinguir libios, que se distinguen por sus faldellines de colores y sus perillas. El registro inferior representa la peregrinación a Abydos.