LUGARES ARQUEOLÓGICOS EN EGIPTO

AIN AMUR en el OASIS de KHARGA

Ain Amur es un pequeño oasis aislado que se extiende entre Kharga y Dakhla, en un ancho saliente a medio camino al noroeste de los acantilados que bordean la meseta de Abu Tartur, en el borde de la depresión de Kharga. Las caravanas que viajaban por Darb Ain Amur entre Kharga y Dakhla se detenían en este manantial (alimentado por frescas aguas superficiales) para descansar del viaje y se convirtió en el sitio de un asentamiento bastante grande e importante. El pozo, con agua que mana a través de la antigua piedra, todavía tiene agua, aunque ahora está ahogada por la maleza. Herbert Winlock visitó y registró los restos arqueológicos de Ain Amur en 1908, después de llegar allí en camello.

Las estructuras que han perdurado en Ain Amur han sido severamente dañadas por las avalanchas de agua que han bajado desde la escarpa durante siglos produciendo inundaciones. Originalmente el sitio estaba cerrado por una gruesa pared de forma irregular de la cual solo perduran dos pequeñas secciones. Los restos más importantes son los de un templo de piedra del Período Tardío en el norte del asentamiento. El templo tiene muros de piedra arenisca y techo construido con losas de piedra caliza y su entrada principal está frente al asentamiento. En un principio contenía tres cámaras y un Santuario, pero sólo quedan las paredes este y oeste. Hay alguna decoración original y numerosos graffitis coptos y árabes. En la pared exterior oeste hay un relieve en mal estado de conservación de una cabeza de carnero de Amón, una figura no identificada con alas y parte de un hombre vistiendo una falda. Un gran cementerio está situado en el lado oriental del asentamiento, aunque muchas de las tumbas han sido saqueadas.